La necesidad de superar nuevos retos en las empresas demanda soluciones innovadoras

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Las empresas de los diferentes sectores industriales se han beneficiado con la introducción de nuevas tecnologías. Desde que la competitividad en el mercado ha aumentado por la competencia y la demanda global de modernización, América Latina se encuentra en un proceso de transformación hacia la tecnología de cuarta generación. La migración a estas tecnologías es una condición necesaria para el desempeño óptimo del Internet de las Cosas.
El Internet de las Cosas (IoT) es la extensión de la conectividad a internet en dispositivos físicos, capaces de comunicarse e interactuar entre sí a través de la red y ser monitoreados o controlados remotamente. Estos objetos inteligentes recopilan grandes cantidades de datos (Big Data) que ofrecen información valiosa para las empresas como la optimización del uso de activos y cadenas de suministro, coordinación de distribuidores y proveedores, localización de equipos, entre otros.



Globalstar, compañía de comunicación satelital con cobertura en más de 120 países, adopta esta tecnología en sus productos y servicios, ofreciéndolo a empresas y trabajadores. Esta nueva implementación es considerada como una gran oportunidad de negocio en América Latina, es por esto que las industrias más importantes tales como: transporte, seguridad, energía, agricultura, marítimo comercial, gobierno y seguridad pública, construcción, minería y forestal; han adquirido esta serie de innovaciones en sus actividades corporativas operativas.

En comparación con otras regiones, América Latina se encuentra rezagada en el fortalecimiento de modelos basados en Big Data, Internet de las Cosas e Inteligencia Artificial. Pero al mismo tiempo, vive un momento de cambios en diversos sectores. Esta combinación es fundamental para que organismos privados y gubernamentales lleven a cabo estrategias para acelerar la transformación digital y lograr que Latinoamérica sea un fuerte competidor a nivel global.

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